Lo reciben los adolescentes que avanzan en su educación cristiana en la catequesis de la parroquia, y la pueden pedir en cualquier edad de la juventud y en la vida adulta.
Son acompañados por los catequistas y sacerdotes. Para ellos se preparan también actividades extraordinarias vinculados a otras actividades de la vida de la Diócesis.
Participan en una catequesis semanal y en la Misa de los Domingos.